Tanto lo pidió y se le dio. Gabriel Milito tiene al jugador que tanto quería para jugar en su equipo. Juan Sánchez Miño se convirtió en el segundo refuerzo tras desvincularse del Cruzeiro de Brasil.
Si bien el pase pertenece al Torino de Italia, el rojo abonara casi 2 millones de dólares por el pase del volante surgido en Boca. También el club de Avellaneda le hará un contrato por 4 años. Sánchez Miño y Milito ya trabajaron juntos cuando Gabriel dirigía a Estudiantes, por eso el incesante pedido del entrenador para contar con los servicios.
Recordemos que Damián Martínez ya había llegado a Independiente y ahora va por Pablo Pérez, otra debilidad del entrenador.
Juan Pablo Chavero
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